«Se creía en “el paraíso infantil”. Freud dice que no, que no existe eso, porque el malestar de los niños, de las niñas, la dificultad con su pulsionalidad hace que no estén felices, o tan felices. Y cuando recordamos, sabemos que hay encuentros con momentos de ausencia total de felicidad.»
Jean Daniel Matet responde:
Transcripción del video:
La felicidad, no sé cómo definirla…
La cosa que me parece importante es saber cómo vivimos con el dolor, con la dificultad de vivir. Porque hay un malestar también, de nuestros síntomas y también de concordar esos síntomas con la vida, con las relaciones, con el ruido de la carretera, la polución atmosférica, o las políticas de ahora en Brasil… (*).
Y también en nuestros países europeos o en los del norte se ve que hay una dificultad para los humanos de saber cómo organizarse. No someterse solamente a los poderes de las empresas, o del dinero.
Tenemos que elegir algunas posibilidades para vivir lo que da felicidad: la felicidad de vivir el amor, la felicidad de vivir con el otro o la otra, la felicidad de vivir con su familia. Eso. No es una felicidad ideal ni imaginaria, la que se puede imaginar a partir de nuestros romances.
De verdad creo que a cada instante puede haber un momento de felicidad… Lacan dice en relación al sujeto: tu heureux. Es decir, feliz. Pero es difícil de entender exactamente lo que quiere decir esa felicidad del sujeto.
Lo que quiere decir se ve en los testimonios que vimos en este congreso, que hay una manera de hacer con la contingencia, una manera de hacer que dice que el sujeto está feliz en esta dimensión de encuentro con la contingencia.
Pero es una manera de hacer que no permite hablar de una felicidad continua. Me parece que es una cosa un poco difícil del lado de la teoría psicoanalítica hablar de este proyecto de felicidad.
De manera muy simple, me parece que podemos hablar de instantes, momentos de felicidad, pero que es una felicidad que tiene una dimensión imaginaria, sobre todo.
Lo que ha planteado Freud particularmente es que desde la niñez, desde el niño, no hay felicidad. Se creía en “el paraíso infantil”. Freud dice que no, que no existe eso, porque el malestar de los niños, de las niñas, la dificultad con su pulsionalidad hace que no estén felices, o tan felices. Y cuando recordamos, sabemos que hay encuentros con momentos de ausencia total de felicidad.
Eso es lo que puedo decir sobre la felicidad.
Entrevista realizada por Iara Bianchi.
(*) NdR: Entrevista realizada en Río de Janeiro, Brasil. Congreso de la Asociación Mundial de Psicoanálisis.
Jean-Daniel Matet
Psicoanalista
Iara Bianchi
Directora Editorial. Psicoanalista