”El paciente adicto es alguien que tiene una dependencia real respecto de un objeto.” ”Encontró la respuesta en ese objeto.” ”Hay que deconstruir esa respuesta absoluta.”
Liliana Vázquez responde:
¿Cómo se construye un síntoma analítico en las adicciones? El paciente adicto a cualquier objeto en particular. Cuando hablo de paciente adicto hablo de alguien que tiene una dependencia real respecto de un objeto, cualquiera fuere: fuese alcohol, toxicomanías, comida, nada, juego, internet. Hoy son muchas las cuestiones alrededor de la temática del ser adicto. Cuando hablo de adicto hablo de una dependencia franca.
Es muy difícil el trabajo que hay que hacer para que emerja el sujeto del inconsciente. Es todo un proceso que se logra a través de la interdisciplina de dispositivos analítico que tienen como objetivo lograr en otro momento la emergencia del sujeto y una pregunta acerca de ese malestar que tiene.
El sujeto que viene adicto a un determinado objeto, a una determinada droga, cualquiera fuere, encontró la respuesta en ese objeto. Una respuesta que aparece como un taponamiento a su angustia. Entonces hay que deconstruir esa respuesta absoluta.
Por ejemplo, en el caso de adicto: “Yo soy adicto y com eso…”. Como en el tango: “Si soy así ¿qué voy a hacer?”. Da absolutamente cuenta de todo lo que le pasa. Es más, nosotros tenemos que lograr que ese que encuentra una satisfacción inmediata en la droga o en el objeto, cualquiera sea, de su dependencia, que le da esa satisfacción y esa anestesia que le tapa la angustia, nosotros decirle: “Bueno, ponga en marcha las palabras, trate de producir un espacio de reflexión y de pensamiento que va a hacer que no sea inmediata esa respuesta del ya y ahora la satisfacción sino una posibilidad de encontrar una pregunta que haga cuenta de su malestar para que pueda encontrar el placer de otra manera y no tapone su angustia”.
Que a la larga… ¿Cuándo nos consultan los pacientes adictos? Yo digo que cuando algo del fantasma se les resquebrajó. Porque mientras el objeto le sirva, mientras el objeto tapone su angustia, es muy difícil que consulten. En general son traídos, no porque sean específicamente psicóticos.
Yo quiero aclarar que la adicción se da en las tres estructuras clínicas: tanto en la neurosis, como en la psicosis, como en la perversión. Pero, en general, son traídos por amigos, familiares. En general, uno comienza en ese dispositivo de abordaje a trabajar con quienes traen la angustia. Por eso, la emergencia del sujeto que se haga una pregunta respecto de su malestar, acontece en un tiempo posterior. El trabajo primero es trabajar con el paciente adicto, con su familia, en interdisciplinas psicofarmacológicas, en todos los aspectos de abordaje para llegar primero…
Yo siempre digo que son pasos: un adicto puede llegar a un sistema de salud y eso no lo constituye en un paciente. De ese adicto hay que, primero, constituir un paciente, es decir, alguien que crea que ese síntoma lo enferma. Ahí estamos en el plano de la ciencia médica. Después de eso hay que lograr que el paciente que entró y piensa que eso sí es un síntoma de algo que le hace mal a su cuerpo, empiece a hacerse una pregunta respecto de por qué ese síntoma le hace mal. Una pregunta respecto de su malestar. Recién ahí empezar a pensar que él es responsable de eso que le acontece: un sujeto del inconsciente que se responsabiliza de sus actos. Por eso digo que es un largo camino hasta pensar el síntoma en análisis desde las adicciones.
Entrevista realizada por Iara Bianchi.