Fabián Allegro: ”El fantasma es un artilugio, un engaño, y siempre lleva a un mismo lugar, que tiene que ver con el fracaso mismo y se expresa de modo sintomático.”
Fabián Allegro responde:
El fantasma es una construcción que tiene que ver con un aparataje. Algo que traduce una anticipación a la idea de una cierta direccionalidad que podría encontrar un camino para el deseo, pero es un engaño. Es un engaño porque confunde al neurótico y lo hace pensar que por esa vía, que está articulada al placer o al displacer, podría realizar algo del orden del deseo.
Es el fantasma el que daría un argumento, como si fuese una obra teatral, que podría darle una orientación al neurótico donde hay una incertidumbre y que se traduciría en un cierto camino en esa búsqueda incesante por el deseo.
Pero el conflicto subsiste porque el fantasma es simplemente un artilugio, un engaño. Y el fantasma siempre lleva al mismo lugar, a un lugar que tiene que ver con el fracaso mismo y que se expresa en algunos puntos a modo sintomático. Hay una relación entonces entre el síntoma y el fantasma, pero son formas de defensa, formas de falsas respuestas frente a la incertidumbre del sujeto respecto al deseo.
Por lo cual, entonces, el fantasma se supone que en el transcurso de un análisis tendría que ser advertido, y una vez advertido en la construcción misma del fantasma el sujeto estaría en libertad de poder decidir si sigue esa orientación o no.
Entrevista realizada por Iara Bianchi.
